
Vista de la fachada translúcida del Parque Cultura, que simboliza el compromiso de la fundación con la apertura cultural y la participación pública en la Ciudad de Guatemala.

Vista de la fachada translúcida del Parque Cultura, que simboliza el compromiso de la fundación con la apertura cultural y la participación pública en la Ciudad de Guatemala.
FUNDACIÓN PAIZ
PARQUE CULTURA
PARQUE CULTURA – REIMAGINANDO EL LEGADO A TRAVÉS DE LA CULTURA ABIERTA
En colaboración con la Fundación Paiz y un equipo de especialistas en branding y reestructuración organizacional, TORUS lideró la transformación arquitectónica y estratégica de una de las instituciones culturales más emblemáticas de Guatemala. Con un profundo respeto por el legado de la familia Paiz, el proyecto reinventa su histórica casa patrimonial no como un monumento estático, sino como el punto de partida para un diálogo abierto y dinámico con la ciudad.
El eje central de esta transformación es el Parque Cultura, un nuevo centro cultural que simboliza la decisión de la Fundación de abrir los brazos a la comunidad. Diseñado como un faro de luz e inclusión de cinco pisos, el edificio emerge tras la casa familiar preservada, con un retranqueo respetuoso que permite que la histórica vivienda sirva tanto de ancla arquitectónica como de escenario paisajístico. Un anfiteatro semipúblico conecta lo antiguo con lo nuevo, fomentando la continuidad y la apertura.
La arquitectura humaniza el lugar eliminando barreras físicas y simbólicas. Los muros perimetrales se desmontan para dar paso a un amplio espacio público, mientras que la piel blanca y translúcida del nuevo edificio crea una sensación de permeabilidad, permitiendo vistas a talleres abiertos, galerías, oficinas y un teatro de caja negra. Rampas y escaleras serpentean a través de la estructura de forma translúcida, revelando el movimiento humano como metáfora de un entorno cultural activo y participativo.
Parque Cultura encarna una visión donde la cultura es visible, accesible y compartida. Con un amplio estacionamiento, un programa orientado a la ciudad y un diseño que promueve la transparencia y la actividad, el proyecto se convierte en un símbolo de cómo el legado privado puede convertirse en valor público y cómo la arquitectura puede contribuir a la democratización de la cultura en la Ciudad de Guatemala.
